La “Doctrina Obama” ante la Depresión más grande de la Historia
Golpe Militar en Honduras, América Latina bajo amenaza
ALAI, América Latina
en Movimiento 2009-09-08
Dr. Wim
Dierckxsens (Holanda)
Dr.
Antonio Jarquin T. (Nicaragua)
Dr.
Reinaldo Carcanholo (Brasil)
Dr. Jorge Beinstein (Argentina)
Dr. Paulo
Nakatani (Brasil)
Dr. Rémy
Herrera (Francia)
Introducción:
Desde
hace más de una década los miembros de este observatorio y otros han venido
alertando sobre la presente crisis, la que explotó a partir del 2008 en el
sector inmobiliario de las deudas sub prime de EEUU. Gobiernos y élites del
primer mundo en primer lugar banqueros, estaban conscientes de lo que venía
ocurriendo mientras hacían preparativos para imponer sus intereses a traves de
una doctrina de guerra permanente, la que prevee el desarrollo de una
guerra ampliada en Eurasia y quizás mas allá, incluso con armas nucleares y
otras de destrucción masiva. Es por esto que a pesar del fin de la guerra fría,
el gasto militar sobre todo en Estados Unidos continuó creciendo hasta
las cifras alucinantes de la actualidad. Conscientes de la insostenibilidad del
actual sistema de “estafa permanente”, se ha venido preparando un nuevo
holocausto para la humanidad, para controlar el mundo, recolonizarlo,
hundir los avances democráticos e imponer el neo facismo a nivel planetario. Lo
que para Hitler era el III Reich para los siguientes 1000 años, pasó a ser para
la nueva élite mundial de predominio estadounidense, el planteamiento de
control unipolar perpetuo del mundo. Una idea que, como fue entonces con
Hitler, hoy es también absurda e insostenible.
La
presente crisis es la convergencia de multiples crisis acumuladas en el marco
de crisis mayores tales como crisis financiera y de la economía real, crisis de
agotamiento de minerales y fuentes de energía no renovable, crisis de
alimentos, o crisis de la ecología, el clima y el calentamiento global. Por su
complejidad e interconexiones hemos venido afirmando que, más que una
crisis estructural del sistema capitalista, se trata en realidad de una gran
crisis de la “civilización”, lo que pone en riesgo la supervivencia de
miles de millones de personas en todo el planeta y a la civilización misma, tal
y como la hemos conocido hasta ahora. Por las razones anteriores, se deben
abordar los múltiples aspectos de esta “crisis de la civilización”, de forma
integral y no solo en sus aspectos económicos, financieros, políticos,
sociales, militares o ecológicos por separado.
Primera
aproximación a la crisis en Estados Unidos
Gráfico: Deuda total de EEUU vs Ingreso Nacional
Estados Unidos debía hasta 2008 untotal de $57
Trillones (Millones de millones), la mayor deuda de la historia.
Eso
es $186,717 por cada hombre mujer o niño o $746,868 por cada familia de 4. El
incremento fue $32,104 más de deuda per cápita con relación al año anterior.
En
2008 la deuda total se incrementó en $3 Trillones, (millones de millones), 8
veces más rápido que el GDP.
Los
intereses de su deuda externa subieron $1.2 Trillones; 79% ($45 trillones)
creados desde 1990. No se incluyen pensiones sub financiadas y promesas
médicas.(Grandfather
Economic Reports - updated May 2009)
Se
define deuda como el total de la misma: deuda federal, estatal, de gobiernos
locales, internacional, privada, familiar, sector financiero y de negocios,
deuda federal a trust funds ($44.2 trillones son deudas privadas/ familiares/
de negocios/ sector financiero, mas $12.8 trillones de deuda federal estatal y
de gobiernos locales en dólares ajustados a la inflación).
Para
1957 la deuda de USA era ya 186% mayor que el ingreso y para el 2008 había
crecido a $57 trillones, 499% del
ingreso nacional. Es
decir, hay una deuda de 5 dólares frente a 1 dólar de ingreso neto, con el
agravente de que buena parte de ese mismo dólar de ingreso se origina en
el sector improductivo de riqueza tales como el complejo militar industrial,
especulación, servicios, comercio, finanzas etc. Esta situación será analizada luego
con mayor profundidad.
Como se comprenderá en base a los
anteriores datos, la economía de Estados Unidos estaba en términos
esenciales técnicamente en quiebra desde hace varias décadas, situación que no
podía ser sostenible indefinidamente. Como es que este país y su élite
dominante lograron mantener esta situación de números rojos por tanto tiempo?,
… Una primer respuesta es: A través de transferencias desde el sur bajo forma
de intercambio comercial desigual, deuda externa, imprimiendo moneda y valores sin
respaldo en producción real, controlando mercados, procesos especulativos y
otros, en síntesis del subsidio creciente desde el sur y los sectores más
pobres del planeta organizado en la “mayor estafa de la historia”. Para ese
efecto utilizan la coacción, el poder militar y el desarrollo de una
gran capacidad para imponer o desestabilizar gobiernos, naciones y
regiones. Esta situación es insostenible en el largo plazo sin una gran
catástrofe planetaria y no sólo por la amenaza de guerra. La FAO estima que para el 2009, cuando la depresión apenas
está comenzando, el número de personas con hambre en el mundo ya ha crecido a
1020 millones, de los cuales al menos 53 millones están en América Latina
Tal situación de saqueo planificado se
oficializó al retirar el dólar del patrón oro bajo el gobierno de Nixon, lo que
permitió masivas emisiones de esta moneda y “valores ficticios” (R.Carcanholo)
fabricados
del aire y sin respaldo en valor real y se amplió ya sin control a partir del
inicio de la globalización neoliberal en los años 90, cuando creció la emisión
de los llamados “productos derivados” que contaminaron todas las finanzas y las
economía de los demás países del planeta. Constituyen en realidad una
gigantesca masa de “capital parasitario” (como lo llama Jorge Beinstein). Una muestra del crecimiento
explosivo de tales “valores ficticios” y en la jerga de Wall Street llamados
“productos derivados” en comparacion con el producto bruto mundial, se muestra
en la siguiente gráfica.
Gráfico: CRECIMIENTO EXPLOSIVO DE PRODUCTOS DERIVADOS
Según el Banco de Basilea, esos productos derivados (empapelamiento,
acciones, deudas públicas, impresiones de dinero sin respaldo, deudas ficticias etc.),
serían para 2008 unos 1000 billones de dólares: 20 veces el Producto
Bruto Mundial. (J.Beinstein/ 7 rostros de la crisis).
En
consecuencia, de cada 20 dólares en papel moneda o títulos valores que circulan
hoy por el mundo, solo uno tendría respaldo y los 19 restantes serían “capital
ficticio” sin respaldo en valor de ningún tipo. Esto explica la enorme
invasión desde los países ricos -en primer lugar Estados Unidos- con
montañas de “dinero” comprando los países del tercer mundo y sus riquezas y
propiedades que si son valores reales. Tal es la naturaleza de la nueva
recolonización del llamado Tercer Mundo impuesta sobre la amenaza de flotas
militares y bases militares para trasformar papeles sin valor en riqueza real:
Para America Latina es como una reedicion de la conquista Española que
entregaba espejos a los indios americanos a cambio de su oro y su plata.
Profundización
de la crisis, ruptura de nuevas burbujas y una gran depresión como freno al capital ficticio
Aunque se habla
mucho de que se vislumbra una recuperación, los comentaristas olvidan que la
crisis no está compuesta de una sola burbuja: la burbuja de los bienes raíces
inmobiliarios, que ya ha reventado y sigue teniendo problemas aún. Andrew Gavin
Marshall plantea que la crisis tiene otras burbujas, que harán parecer pequeño
el estallido de la burbuja de la vivienda de 2008. Los indicadores muestran que
el próximo posible estallido es el de la burbuja de los bienes raíces
comerciales. Esta categoría incluye a edificios de apartamentos, hoteles,
torres para oficinas y centros comerciales. Cuando la inversión
residencial bajó un 28,9% entre 2006 y 2007, la inversión en bienes raíces
comerciales aumentó un 24,9%. La inversión en bienes raíces comerciales estaba
sirviendo como amortiguador a la caída en la inversión inmobiliaria. Con ello
se atrasó su estallido. Los bienes raíces comerciales siguen las tendencias de
la vivienda, y así lo hará la crisis. El principal evento que se aproxima, sin
embargo, es la “burbuja de la deuda de los rescates” y la burbuja de la deuda
mundial en general, que arrojará al mundo a una Gran Depresión de una dimensión
como no ha sido vista en la historia (Véase, Andrew
Gavin Marshall, “Entramos a la mayor depresión de la historia Futuras
burbujas a la espera de estallar”, en www.rebelion.org )
Con la ´Burbuja de
Rescate´, la Reserva Federal y el gobierno de EEUU nada más han logrado
retardar la crisis mundial inevitable, al suministrar cada vez más liquidez a
una burbuja que ya estaba inflada. A fines de marzo de 2009, el gobierno de
EE.UU. y la Reserva Federal habían gastado, prestado o comprometido 12,8
billones de dólares en la “burbuja del rescate, lo que casi equivale al PIB de
EEUU. Cálculos más recientes de julio, estiman que la suma alcanzaba los 25
billones de dólares, es decir, casi el doble del PIB estadounidense. El mercado
bursátil y los jugadores en la bolsa están otra vez en la gloria después de un
repunte de 50%. Parece que no quieren entender que un crédito por billones
(trillons) de dólares no genera una recuperación real ya que no está creando
nada (Bob Chapman, “Collapse in the Wake of the Fed's Wall Street Bubble?”, www.globalresearch.ca ).
Cuando reviente esta mega-burbuja ello significará el fin del ciclo de
boom/quiebra de la actividad económica en todo el mundo desarrollado. Cuando
esta ‘Burbuja del Rescate’ estalle, no tendrán a su disposición los arreglos
fiscales o las políticas monetarias para inflar otra y habrá que comprender,
afirma Marshall, que, como recurso último del imperio, puede sobrevenir una
gran guerra.
Contradicción
estructural del sistema
La
crisis inmobiliaria cuyo epicentro se dio en los propios Estados Unidos, es la
primera gran manifestación de una contradicción estructural del sistema
capitalista con consecuencias mucho más profundas de lo que se divulga por los
medios hoy en día, (señala Reinaldo Carcanholo). Frente a la falta de rentabilidad en el ámbito
productivo y real de la economía, el capital se dirigió a partir de los años
setenta hacia el ámbito improductivo y especulativo, lo cual encontró una
respuesta adecuada en la política neoliberal en el mundo entero, en particular
en los países centrales. En la especulación el capital encontró una
rentabilidad más elevada que en el propio ámbito productivo y naturalmente en
gran parte se dirigió hacia ella. Los gobiernos neoliberales favorecieron esta
política desde el año 1973, cuando EEUU abandonó el patrón oro-dólar que
permitió el inició de la
especulación con monedas. Toda la valorización especulativa de activos durante
las últimas décadas, sean acciones, títulos o bienes inmuebles, implicó un
crecimiento del patrimonio de sus poseedores, sin que significara ganancia en
la economía real. Es decir, el poseedor de un activo de ese tipo, al final de
cada año percibe una ganancia y aumento de su patrimonio siempre y cuando la especulación
mantenga el precio de esos activos sobre- valorizados. Por detrás de esas
ganancias, sin embargo, no hay nada real y eso año tras año. Trátase por lo
tanto de una economía especulativa de larga trayectoria que no se resuelve en
un dos por tres como insinúan los medios (Reinaldo Carcanholo, “Especulación
con el dinero es la causa de la crisis”, Semanario Universidad, Costa Rica,
julio 2009, pp 6-7).
El
hecho de realizar ganancias ficticias en un año determinado a partir del
capital especulativo, implica que al año siguiente ese capital especulativo
será mayor y va a aspirar una remuneración igualmente mayor. Al mismo tiempo,
la brecha entre inversiones productivas e improductivas aumentará. Hay cada vez
más capital especulativo con aspiraciones a crecientes ganancias comparando con
el capital que genera ganancias en la economía real. Es más, resulta cada vez
más des-estimulante invertir en el último sector. Es decir, hay una creciente
contradicción entre la desacelerada producción de riqueza y la necesidad de un
ascendente capital especulativo que busca apropiarse de la misma. Tal
apropiación básicamente se soluciona temporalmente con la realización de nuevas
ganancias ficticias, afirma Carcanholo, ya que el aumento en el grado de explotación de la
fuerza de trabajo (propio al neoliberalismo) no da abasto para ello. El
resultado es que con el aumento del espiral especulativo sin precedente en la
historia del capitalismo, aumenta sin cesar el espiral del capital ficticio.
Eso significa que año tras año, como en el ´juego de pirámide´ se tiene
necesidad de un monto absoluto de remuneración mayor, buscando nuevas y nuevas
formas de capital especulativo como los “productos derivados”.
La
lógica especulativa opera como una bola de nieve en una pendiente que se
agranda con velocidad cada vez mayor hasta que se tropiece y se reviente. La
solución para lo inmediato implica dejar un problema cada vez mayor como
herencia para el futuro. Ante la enfermedad latente y cada vez más grave,
aumenta de manera significativa la medicina a aplicar una vez que se manifiesta
la crisis. Mientras no se evidencia la contradicción y no se revienta la “bola
de nieve”, la ganancia ficticia, sin embargo, aparece real. La enfermedad no se
manifiesta en otras palabras. Esta ´realidad´ se mantiene mientras las
ganancias especulativas sean intercambiables por riqueza real. Tarde o
temprano, sin embargo, tiene que venir la crisis.
Especulación,
crisis inmobiliaria y crisis de la economía real
Hace
años –como ya señalamos- los analistas críticos del Observatorio Internacional
de la Crisis la veíamos venir. Las apariencias decían lo contrario, pero en
esencia se estaba agrandando todos los días la economía especulativa. En la era
de la globalización, el espiral especulativo se pudo sostener durante mucho
tiempo al involucrar al mundo entero. Esto diferencia esta crisis de la Gran
Depresión del siglo XX. Después de haber afectado muchos países periféricos,
finalmente el sistema se reventó en el centro del imperio y en su eslabón más
débil: reventaron las hipotecas basura o ´subprime´ en EEUU. Como las mismas
las calificaron como seguras, fueron adquiridas por la banca en muchos países.
Cuando la crisis crediticia estalló fue, inmediatamente una crisis a nivel
internacional. La consecuencia de la crisis fue una tasa de ganancia en brusca
caída. Por lo demás, la especulación inmobiliaria fue un fenómeno común en todo
Occidente y más allá. La crisis en EEUU solo activó la crisis especulativa en
el mundo entero y por ello constituye el epicentro de la misma (Reinaldo
Carcanholo, “Especulación con
el dinero es la causa de la crisis”,
Semanario Universidad, Costa Rica, julio 2009, pp 6-7).
Hoy,
en apariencia, la crisis inmobiliaria pareciera estar detrás de nosotros, pero
lo que dejó es una crisis en la economía real. Las inversiones productivas han
declinado en el mundo y sobre todo en Occidente, acentuando la crisis en su
economía real. La misma repercute también en el mercado de propiedades
comerciales. Este mercado se encuentra en la actualidad y en la mayor parte del
mundo en serias dificultades. Las propiedades comerciales en EEUU alcanzan una
tasa de desocupación de más del 11%. En Europa (Londres y París) la cifra
alcanza el 20% y en China (Beijing) incluso un 22%. Debido a sus crecientes
tasas de desocupación, los precios de las propiedades comerciales están cayendo
de manera dramática. Desde su pico en octubre de 2007, los precios de las
propiedades comerciales estadounidenses cayeron en un 35%. En Europa la
situación no es más alentadora. Disponemos sólo de cifras de unas ciudades. En
Rusia (Moscú) los precios han caído en un 63% en tan sólo un año y con eso
ocupa apenas el tercer lugar después ciertos distritos de Londres (West End) y
París (The Economist, August 1st., 2009, pp 61 y 62).
Gráfico: Ventas de propiedades comerciales en EEUU
2006-2009
Tomado de The Economist 1 de Agosto de 2009
Crisis en la
construcción comercial, insolvencia y depresión.
Los
préstamos sobre propiedades comerciales han sido ligados a instrumentos
financieros complejos conocidos en inglés como “Comercial Mortage Backed
Securities” (CMBSS). Este constituye otro espiral especulativo de capital
ficticio que probablemente encontrará antes de fines de este año su límite.
Todo eso suena a un “déjà vu” de la crisis inmobiliaria. Los ´securities´ más
riesgosos y que fueron emitidos en EEUU entre 2005 y 2007 ya entraron en
problemas serios debido a una creciente incapacidad de pago incluso de los
intereses. Hacia fines de 2009 se estima que en EEUU la tasa de incapacidad de
pago en este sector podría alcanzar el 12%. Una crisis en los préstamos de
riesgo en el ámbito de la construcción comercial se suma a ello. Esta situación
conjunta podría generar otra crisis bancaria y financiera en EEUU durante los
últimos meses de 2009 y que afectará sobre todo a bancos más pequeños (The
Economist, August1st. 2009, pp 62). ¿Habrá capacidad de otro rescate bancario o
será la última crisis que anunciará la crisis de los bonos del tesoro al
mostrar una suspensión de pago por incapacidad al nivel del propio gobierno de
EEUU? Nosotros creemos lo último.
Estamos
entrando, en otras palabras, en la Gran Depresión del Siglo XXI. En Estados
Unidos, el Reino Unido, la Eurozona y Japón, habrá una recuperación sin
recuperación (« recoveryless recovery »), o sea, una recuperación de mentiras. La actual recesión consiste en una quiebra crediticia de una magnitud
propia de tiempos de depresión. El sistema financiero, en efecto, se ha
fundido. El sistema crediticio al por mayor (titularización) está paralizado.
El sistema bancario es insolvente y el gasto en consumo está colapsando. Solo
gracias a las inyecciones de la Reserva Federal las acciones bursátiles no han
dejado de subir en los últimos meses. Los grandes bancos hacen un festín con
los billones (trillions) que les han otorgado. Como adictos volvieron al juego
especulativo y de nuevo subieron las apuestas. Pretenden así hablar de una
recuperación. El “capital ficticio” busca, en otras palabras, nuevas “ganancias
ficticias” ya que no invierte en la economía real, situación que precisamente
ha sido la causa de la crisis. Es la recuperación del capital ficticio rumbo a
un colapso mayor. Es sorprendente el paralelo con la crisis de los años
treinta. Hasta noviembre de 1929, la bolsa cayó un 35%, casi idéntico a la
caída de octubre-noviembre de 2008. Después hubo una marcada recuperación que
duró 155 días con un realce de 48%. La recuperación a partir del 9 de marzo
lleva en el mismo tiempo casi idénticas cifras. La correlación de 0.8 es
inusualmente alta (Véase el grafico abajo).
Gráfico:
Recuperación y recaída de bolsa de EEUU 1929-1930 y 2008-2009
Fuente:
David Rosenberg, tomado de Graham Summers, ob.cit.
Obtener más capital
ficticio aplaca el ansia, pero agrava el problema de colocarlo y genera más
burbujas. Mientras tanto, la tensión crece entre los muy ricos y quienes perdieron
su empleo, su casa, y suelen pagar intereses usureros a la banca y el sistema
financiero por las deudas que no pueden pagar. La riqueza de los hogares
estadounidenses ha disminuido en un 14% desde el comienzo de la crisis. El
valor de la vivienda ha caído un 41%. El desplome de los precios inmobiliarios
está obligando a los hogares a recortar sus gastos, lo que debilita la demanda
y eleva ulteriores despidos. Hay cada vez más gente que no puede pagar sus
deudas en general y las de sus tarjetas de crédito en particular. Los bancos
cobran intereses usureros pero en la economía real continúa la caída de la
demanda y hay nuevos negocios que quiebran. Es un círculo vicioso que termina
en una ralentización del crecimiento. Las posibilidades de una recuperación
entonces son casi nulas. ¿De dónde se supone que provengan los gastos de
consumo que solían representar un impresionante 70% de la actividad económica?
No hay ni chance de recuperación según Mike Whitney (“Por
qué la economía no ha tocado todavía fondo” en CounterPunch).
La crisis real no
son los millones de millones (trillions) de dólares en valores que se hicieron
humo. Esas eran cifras ficticias: cotizaciones en bolsa, trampas contables o
pirámides financieras, que son las ganancias ficticias que se hicieron humo. Se
compra acciones sobre la base de ganancias esperadas a futuro de las compañías.
Esas ganancias hoy en día son aún más reducidas de las que fueron en los años
treinta durante la Gran Depresión. EEUU ya estaba en recesión en 2008 y las
ganancias en el segundo cuatrimestre de 2009 están 31% por debajo de ese nivel.
Desde su máximo en 2007 las mismas han caído en términos reales un 98% como
puede observarse en el siguiente gráfico.
Fuente: Graham Summers, “The Bear Market Is NOT
Over, And Stocks Will CRASH This Fall”
La economía real
y el empleo
La crisis verdadera
es la contracción en la economía real, el creciente desempleo, la contracción
en los ingresos y el empleo precario. En la actualidad, los ricos estafadores
de Wall Street y Londres se recuperan y todo el mundo político y mediático se
ocupa de su prosperidad. Sin embargo el salvamiento de los ricos no salvará a
la economía real ya que su consumo suntuario y militar no basta para sostener
la demanda efectiva. No habrá, en otras palabras, una
recuperación económica al salvar al capital especulativo. Al contrario, para
los próximos meses ni siquiera podremos hablar de una recuperación sin empleos
(« jobless recovery ») como tratan de vendérnoslo numerosos expertos en la
materia. A principios de 2009, los inmensos despidos en EEUU hicieron
que la cantidad de nuevos desocupados aumentara entre 600.000 y 700.000 por
mes. En los últimos meses, el nuevo desempleo aumenta “sólo” en 500.000 por
mes. A partir de esas cifras los medios concluyen que, como la cantidad de
nuevas personas que cobran prestaciones de desempleo está disminuyendo, hay
signos de recuperación.
La
tasa de desempleo oficial en EEUU casi llega al 10%. Lo
cierto es que el desempleo sigue aumentando y a niveles mucho más altos de lo
que las estadísticas oficiales revelan. Las prestaciones de desempleo cubren
tan solo la mitad de los trabajadores estadounidenses. El resto, 50%, no tienen
derecho al seguro de desempleo y muchos de ellos sin trabajo (los inmigrantes
ilegales particularmente) simplemente no son registrados como desempleados por
las estadísticas del gobierno. Los desempleados crónicos con más de 59 semanas
sin encontrar trabajo tampoco aparecen en las estadísticas (el límite superior
para cobrar prestaciones de desempleo en EE.UU.) en el momento preciso que la
crisis se presenta y cuando las perspectivas de encontrar pronto otro trabajo
se esfuman. Si incluyéramos toda esa gente a la tasa global de desempleo,
tendríamos en EE.UU. una tasa de desempleo superior al 18% y posiblemente
cercano al 20%.
Cifras oficiales de
desempleo que abarcan el 20% de la población activa se encuentran en Europa
(España) y África (África del Sur). Las tasas de desempleo en América Latina
están oficialmente por debajo del 10%, las juveniles están claramente por
encima del 20% y el desempleo por subempleo puede abarcar a más de la mitad de
la población. Estas tasas de desempleo oficiales, sin embargo, puedan hasta
duplicarse con una gran depresión (Dave Lindorff, “Vuelta
a la realidad: La recesión no ha terminado, ni por asomo”). De ser así, ello implicaría que casi la mitad de la población
estadounidense estaría sin trabajo. Las consecuencias sociales y políticas se
dejan adivinar y el Estado policiaco está en plena marcha, principalmente en
EEUU. Lo anterior implicará un polvorín político que intentarán capitalizar los
halcones para implementar un Estado Neo-Fascista. Al mismo tiempo habrá una
fuerte polarización en EEUU y aún es hora de luchar por otra alternativa
política. No necesitamos hablar de los efectos sociales que conlleva una
depresión en los países periféricos.
La
depresión más grande de la historia y el colapso de la economía de EEUU
Contrariamente
al discurso mediático y político dominante, no se puede esperar en absoluto el
inicio de una recuperación en los próximos 12 meses como se señalaba en agosto
de 2009. Una contracción de la economía real y un notorio
ascenso en las tasas de desempleo serán el panorama común en los países de la
OECD. Informes del Fondo Monetario Internacional (FMI) auguran que el PIB
mundial se reducirá este año 1,3 %, mientras que el Banco Mundial es más
pesimista al afirmar que la disminución será de 3%, sin incluir a China ni a la
India. En otras palabras, el mundo en su conjunto, pero sobre todo Occidente,
ya está entrando a una gran depresión. Según cifras de “The Economist” (1 de
Agosto de 2009: pp 81), en el último cuatrimestre, el PIB de EEUU cayó en un
5.5%, el de la UE en 10% y el de Japón incluso en más de 14%. Estas cifras
suelen ser corregidas para mal meses después al conocerse las cifras
definitivas. El real panorama entonces es aún más grave.
En América Latina
la situación de la recesión es menos severa y un tanto diversa. En México
(el país latinoamericano más anexado a la economía norteamericana), el PIB cayó
en más de 21%. La lectura es que EEUU deja caer los efectos negativos de la
crisis en primer lugar sobre México. De esta forma el vecino del Norte trata de
salvar la economía interna. Las cifras son menos desalentadoras en países
con un proyecto económico más endógeno. Brasil, uno de los llamados países
emergentes, aunque más conectado con el ámbito financiero y especulativo,
sufrió una caída en su tasa de crecimiento económico de 3,3% y Chile, otro país
fiel a las políticas neoliberales, 2,4%. En medio de la crisis Argentina y
Venezuela (país que procura alejarse más de las políticas neoliberales),
mostraban todavía cifras levemente positivas (The Economist, 1 de Agosto de
2009: pp 81). Cuanto más desacoplada esté una nación latinoamericana menos
fuerte el impacto de la crisis. El resultado anterior estimulará las políticas
de desconexión en América Latina durante la gran depresión.
Frente a este
cuadro recesivo a nivel mundial, llama poderosamente la atención el crecimiento
del PIB tanto en China (8%) como en la India (6%). La producción
industrial de China aumentó, según “The Economist” (Ob. Cit.) en más de 10 % en
junio de 2009, cifra que contrasta fuertemente con la caída de 14% de la
producción industrial en EEUU, un 17% en la UE e incluso un 23% en Japón. Si no
hubiera sido por el fuerte incremento en el gasto de defensa durante la
administración Obama, la cifra norteamericana hubiese lucido mucho peor. La
producción industrial en Brasil, Argentina y México cayó en un 11%. Debido al
creciente proteccionismo en Occidente, las exportaciones de China cayeron
durante el último año incluso en más 40%. China solía exportar el 40% de su PIB
y por lo tanto se ve particularmente afectado por las medidas proteccionistas
en Occidente.
Gráfico:
Balance comercial de China 2005-2009
Fuente: Goldman Sachs
Al
ver que al mismo tiempo que crece el PIB de China caen sus exportaciones, caben
hacerse dos interpretaciones posibles y cada una explicará parte de la verdad.
La economía de China pueda estar creciendo, al menos en parte, por un ascenso
en el capital ficticio que suele ser contabilizado en su ascenso como si fuera
real. Durante los primeros siete meses de 2009 la compra/venta de propiedades
chinas subió en un 60% cuando al mismo tiempo la bolsa china de valores (SSEB)
subió (desde fines de 2008) en un 90%, cuando el índice bursátil a nivel
mundial (MSCI) apenas subió un 14% en el mismo período. Sobre esta base podemos
afirmar que la economía especulativa en China está en plena marcha (The
Economist, 1 de agosto de 2009).
Una
lectura alternativa es que el producto chino industrial ha sido absorbido, de
manera significativa, por una demanda interna ascendente. Para lograrlo, China
ha tenido que destinar reservas internacionales al fomento de su demanda
interna y/o dejar de adquirir nuevos bonos. Desde setiembre del año pasado el
apetito de China para aumentar sus reservas en nuevos bonos del Tesoro de EEUU
ha disminuido drásticamente y así sucedió a nivel mundial. El país contaba con
las mayores reservas en divisas del mundo (2,13 billones de dólares) y la mitad
en bonos del Tesoro de EEUU. Con ello poseía el doble de reservas de las que
tenía Japón, el segundo país en esa lista. China no solo ha diversificado sus
reservas internacionales comprando oro y materias primas, sino también las ha
invertido en las obras de infraestructura. Al hacer grandes inversiones en la
construcción de obras de infraestructura al interior del país, en los últimos
doce meses los ingresos monetarios per cápita no solo crecieron en la zona
urbana (11,2 %) sino también en las zonas rurales (8,1%) de China (Véase,
Hedelberto López Blanch, “China,
contra todos los huracanes”, www.rebelion.org,
10 de agosto de 2009).
La
amenaza de la desintegración del sistema monetario internacional
El hecho de que desde setiembre de 2008 ya no hay demanda a
nivel internacional de los bonos del Tesoro de EEUU repercute en la principal
potencia. Con sus gigantescos planes de rescate e histórico gasto de defensa,
EEUU ocupa nuevos créditos externos por unos dos billones de dólares al año.
Sin esas grandes inyecciones de crédito, EEUU ya se hubiera encontrado en una
Gran Depresión. Pero este país se encuentra en problemas desde fines del año
2008. En realidad, la Reserva Federal está comprando desde setiembre de 2008 los
bonos del Tesoro de Estado ´offshore´ (en las Bahamas) para mantener la
apariencia que hay una demanda externa sostenida de bonos.
Gráfico: Porcentaje de la deuda nacional de EEUU en bonos (curva
superior) y en billetes impresos (curva inferior), de mayo 1995 a julio 2009
Con esa ´garantía´ la Reserva Federal imprime dólares ó
otorga crédito sin límite aparente. Esos ´dólares chatarra´ no se invierten
luego en el ámbito productivo, sino que regresan básicamente al mercado
bursátil, a la guerra y al complejo industrial militar.
Vender la idea de una recuperación a la vista es la
modalidad para prolongar el mayor tiempo posible que los países compradores de
los bonos del Tesoro estadounidense y del Gilts británico mantengan un mínimo
de confianza y no se deshagan en pánico de dichos bonos. Sin lograr mantener
esa confianza, el sistema financiero y monetario colapsaría. El resultado, sin
embargo, es que el sistema monetario mundial se está desintegrando cada vez
más.
El
colapso del dólar y la profundización de la crisis
El
mundo ha funcionado y sigue funcionando como una economía basada en deudas, es
decir, en pagarés. Esto significa tratar de mantener la confianza a toda costa
aunque sea bajo amenaza de guerra. La deuda de EEUU ha sido mayor que la deuda
de todos los demás países del mundo juntos y con ello constituye el epicentro
de la crisis. Ante el colapso inevitable del dólar,
los rusos y los chinos aceleran su juego para situarse en la era Post-Dólar. No
hay mucho tiempo que perder. EEUU tiene bajo amenaza de guerra a China para que
no vendan masivamente los bonos del Tesoro, aunque EEUU dejó de ser un fuerte
importador de productos chinos. Sobre la base de una amenaza de guerra, los
chinos no se atreven deshacerse masivamente de los bonos del Tesoro y así ´se
mantiene a flote´ el dólar. En octubre de 2009, sin embargo, cuando se
harán conocer los rendimientos negativos en la economía real, el mundo se dará
cuenta que los productos hechos en EEUU y Gran Bretaña en particular pero de
Occidente en general, ya no tiene futuro. Con ello habría las condiciones
para otro colapso en la bolsa de valores (H.G
Fandrich, LEAP/E2020,“Tres olas gigantes”, www.globalresearch.ca ).
Para cientos de millones de habitantes de América, Europa,
de Asia y África, el otoño boreal de 2009 podrá anunciar una terrible
transición hacia un empobrecimiento duradero de sus clases medias debido a
elevadas tasas de desempleo, sin perspectiva de encontrar otro trabajo antes de
dos, tres o cuatro años; o debido a la evaporación de sus ahorros colocados
directamente en el mercado bursátil; el colapso de los fondos de jubilación por
capitalización o; por las colocaciones bancarias atadas a la bolsa; o bien
debido a su inversión en las empresas empujadas a esperar desesperadamente una calma
que aparentemente no vendrá por
mucho tiempo.
Tres
nuevas olas gigantes
La Gran Depresión del Siglo XXI estará instalándose con
toda su fuerza en los próximos meses. El informe GEAB36, considera que en los
meses de setiembre y octubre de 2009 en adelante se producirá la convergencia
de tres « olas gigantes » particularmente destructivas, reflejando la
profundización de la crisis, que originará convulsiones históricas en términos
económicos, sociales y políticos. Aunque no todas las regiones del mundo se
verán afectadas de igual forma, en la opinión de sus autores, todas, sin
excepción, experimentarán una gran degradación de su situación durante el
último cuarto de año.
En los meses de setiembre y octubre de 2009, la incapacidad
de pago de Estados Unidos y del Reino Unido para financiar sus déficits
públicos, ya descontrolados, será seriamente cuestionada en el debate
internacional. La cesación de pago de Estados Unidos y del Reino Unido, ambos
núcleo del sistema global en crisis, será la primera ola económica, social y
política ya que podrá conllevar a la crisis terminal del dólar norteamericano y
de la Libra Esterlina. El informe de GEAB36 menciona en segundo lugar, que
prevén una ola de quiebras en serie: empresas, bancos, inmobiliarias, ciudades,
regiones y hasta Estados, con otro gran impacto económico, social y político ya
que conlleva a una tercera ola: la de desempleo masivo, caída de ingresos,
hambrunas, etc.. Estas tres olas además no serán sucesivas sino simultáneas,
asincrónicas y no paralelas y por lo tanto muy destructivas. Por su impacto
sobre el sistema mundial, las tres olas marcarán la Gran Depresión
del Siglo XXI, lo que podría desembocar en el clima político para una gran
guerra a escala ampliada o mundial. (Véase GEAB 36, ob. Cit.).
Según
el economista estadounidense, profesor de la Universidad de Nueva
York, Nouriel Roubini, se trata de una "recesión de doble caída"
y se puede esperar además un aumento de los precios del petróleo que frenará
aún mas la actividad económica. En conclusión: la reanudación será
fantasmagórica y la recaída inevitable. Una "recesión de doble caída"
provocaría un frenazo brutal de la actividad (...) recalca Eswar Prasad,
profesor de la Universidad de Cornell, en Estados Unidos. (Jeremy Tordjman
PARÍS (AFP), 25 agosto 2009)
Neo-fascismo
en Occidente vs lucha por un proyecto endógeno de América Latina
Desde
el estallido de la crisis financiera hacia finales de 2008 las exportaciones
han caído a nivel mundial y sobre todo en los principales países exportadores
del mundo. En los 15 países de mayores exportaciones, las mismas
cayeron en promedio un 30% y en algunos de ellos como China, Taiwán y
Rusia (aunque no figura entre los primeros 15) incluso más de 40%. No había ni
un solo país donde las exportaciones aumentaron. En México, Brasil y Argentina
las exportaciones cayeron en un 25%, es decir, algo por debajo de la media de
las naciones con más exportaciones. La caída relativa en el comercio se dio por
encima de la media en los países centrales. Las exportaciones de Francia,
Alemania, Gran Bretaña y Canadá cayeron en un 33% y las de Japón casi 40%. El
hecho que las exportaciones estadounidenses cayeron solo en un 22%,
probablemente se debe al creciente componente de exportaciones de
productos y servicios bélicos.
El
patrón en la caída de las exportaciones en los países centrales es mucho más
agudo que el descenso en el crecimiento de sus economías. La lectura es clara.
A partir de la crisis, las economías centrales se volcaron más hacia adentro.
Las mismas procuran salvar a sus empresas para evitar una mayor caída de su
propia economía. En una economía globalizada, la contracción del comercio en
una potencia tiene como resultado inevitable su contracción en otras naciones
por las largas cadenas de producción construidas a nivel internacional a partir
de la globalización. El comercio mundial se declina de una manera marcada por
esos efectos de encadenamiento a través del globo. Lo anterior a su vez impacta
de nuevo negativamente en el comercio y se da así un círculo vicioso. Sin
embargo, la fuerte contracción en el comercio no guarda relación con el patrón
observado en la baja en las tasas de crecimiento. La caída en el comercio
internacional no responde, en otras palabras, exclusivamente a la contracción
de las economías centrales. Lo anterior quiere decir que a partir de la crisis
económica de 2008 está aumentando el proteccionismo en el mundo. Esta tendencia
fue incentivada por el discurso de la economía de desacople que apenas se
anunció en la crisis financiera en EEUU.
Comercio mundial se hunde - Gr. 1: evolución
anual de las exportaciones de los 15 mayores países exportadores (1991-02/2009)
/ Gráf. 2: evolución anual de las exportaciones de los 15 mayores países
exportadores entre febrero de 2008 y febrero de 2009
El
proteccionismo de las grandes potencias
El proteccionismo
es una política de “salvase quien pueda” en un mundo que se está hundiendo. Con
el neoliberalismo en plena crisis, los países centrales se vuelcan hacia
políticas más proteccionistas, es decir, importan menos y con ello los países
periféricos también podrán exportar menos. La composición de las exportaciones
entre centro y periferia es de un gran contraste. Las exportaciones de los
países centrales tienen un alto componente de bienes de capital. Las de los
países periféricos en cambio consisten sobre todo en bienes de consumo y
materias primas. La caída en las exportaciones de bienes de consumo duradero,
entre los países emergentes como China, pueda ser compensada por un alza en la
demanda civil interna. La caída en las exportaciones de bienes de capital en
los centros del poder, solo se compensa con el alza de una ´demanda´ (interna y
externa) de productos bélicos de su complejo industrial militar. Esto es
claramente el caso de EEUU cuyas exportaciones cayeron mucho menos que las de
Alemania o Japón. La demanda efectiva del producto final de ese complejo
industrial militar puede aumentarse a través del impulso de la guerra
permanente. Con ello, el costo improductivo de la guerra puede ser transferido
a otras naciones. He ahí la inclinación de EEUU y Gran Bretaña por el
keynesianismo de guerra. Lo anterior crea el clima político en el centro de poder
para lanzarse a una aventura militarmás amplia y compleja.
Al caerse las
posibilidades de exportación hacia los países centrales, las economías
periféricas, quiéranse o no, se ven prácticamente obligadas a volcarse también
más hacia adentro. Esta situación constituye una amenaza y una oportunidad a la
vez. La crisis no solo brinda la oportunidad de un proyecto más endógeno sino
también genera la necesidad de un desacople. La misma contracción en el
comercio internacional pone en crisis a las políticas de anexión inherente al
proceso de globalización neoliberal mediante los tratados de libre comercio.
Estas políticas económicas solían trazarse en beneficio de los intereses
transnacionales y financieros y por lo tanto estaban volcadas hacia la
maximización en la apertura económica. Conforme se vaya profundizando la crisis
mundial habrá, en otras palabras, una oportunidad más clara para América Latina
de recuperar su autodeterminación. Lo anterior, sin embargo, constituye una
amenaza para los intereses imperiales y aquella fracción de las élites criollas
conectadas con los intereses transnacionales.
Ante la crisis
profunda, los centros del poder se inclinan por una mayor protección también en
materia del empleo, al cuál los nacionales consideran tener más derecho que los
foráneos. En los países centrales el desempleo cada vez más generalizado
genera, en otras palabras, mayor xenofobia. Con ello, el ´salvase quien pueda´
se torna también en un proyecto popular, excluyente y políticamente de extrema
derecha. Sobre esta base se monta el proyecto proteccionista del empresariado.
Hay una tendencia hacia la nacionalización de empresas en problemas. Estas son
financiadas o intervenidas por el Estado para salir otra vez a flote. El
financiamiento que reciben es condicionado al fomento de la demanda interna. El
lema es: ´Buy american´, ´Buy british´, etc. El nacionalismo está de regreso en
las diferentes políticas de los países centrales. El mismo representa una
actitud colectiva nacional de salvarse a costa eventual de las demás naciones.
Estas tendencias proteccionistas, xenofóbicas y nacionalistas son ingredientes
para fomentar el neofascismo.
La desconexión y
re-conexión en América Latina y el papel de las migraciones.
La consecuencia
para los países latinoamericanos es totalmente otra. Con la crisis económica y
el consecuente desempleo, hay migración de retorno y las remesas suelen ir en
picada, como puede observarse en el gráfico abajo. Con ello se acaba el ´sueño
norteamericano´ que constituía una válvula de escape individual o familiar ante
las dificultades económicas y la exclusión en el propio país. Aunque el
neoliberalismo trajo más desempleo y exclusión, las migraciones operaban como
válvula de escape individual o familiar. Al poder salvarme a través de la
migración yo individualmente o con mi familia, esta misma válvula de escape no
solo suele despolitizar, sino que además tiende a que los (potenciales)
migrantes se alinean con el sistema neoliberal que pareciera brindar estas
oportunidades.
Gráfico: Descenso en la construcción en EEUU y remesas a México 2007-2009
Tomado
de “The Economist” 1 de Agosto de 2009
Este ´salvase quien
pueda´ a nivel individual o familiar se acaba, sin embargo, conforme la
migración se torna cada vez más difícil. Cuando hay migración de retorno por el
desempleo en el país de destino y las remesas se ven en picada, se acaba el
´sueño norteamericano´. Con la crisis se acaba asimismo la apertura económica
para los migrantes y con ello la válvula de escape para solucionar los
problemas económicos en lo personal o a nivel de la familia. La nueva situación
demanda un proyecto endógeno y más allá de lo individual o familiar, es decir,
demanda un proyecto político alternativo “dentro de mi país”. Con la crisis
cada vez más generalizada se cierran las oportunidades de trabajo incluso más
allá de las fronteras y con ello aumenta la crítica popular al neoliberalismo y
a los gobiernos que lo han propagado. Es precisamente en esta coyuntura que se
dió el proceso electoral en El Salvador donde se agotó el espacio del partido
neoliberal de Arena y ganó en marzo de 2009 el proyecto político del Frente
Farabundo Martí con Mauricio Funes como presidente, fórmula que podría brindar
alternativas más endógenas ante los ojos de los votantes.
Con la
profundización de la crisis económica, cada vez más países latinoamericanos
necesitanun proyecto político más endógeno y los procesos en marcha tienden a
profundizarse. Si antes no se podía hablar de nacionalización de empresas, hoy
con la crisis esta práctica está de moda en los propios centros del poder. Si
antes de la crisis el apartarse de las políticas neoliberales, es decir, la
desconexión era algo muy difícil de lograr, al profundizarse la crisis del
neoliberalismo, los proyectos más endógenos se tornan una necesidad ante la
brusca caída del comercio internacional y la exportación de la crisis al Sur.
Al no poder
importar todo lo necesario hay que ver obligadamente lo que se puede producir
localmente o regionalmente y sustituir importaciones extra regionales. Lo
anterior protegería además las monedas locales amenazadas ante un eventual
hundimiento del dolar. La recuperación de la capacidad de producción
agropecuaria para conseguir la soberanía alimentaria constituye una de las más
altas prioridades en este contexto. Frente a la esperable caída del ingreso,
del empleo, de las exportaciones y las remesas familiares, así como los
esperables efectos negativos del cambio climático, la producción masiva de
alimentos, la reforestación, protección del medio ambiente y los recursos
naturales, se vuelven algo realmente estratégico e impostergable para la
sobrevivencia dentro de las fronteras nacionales y regionales en América Latina
y el Caribe. De igual manera el desarrollo de un sistema solidario
internacional regional para hacer frente a desastres naturales esperables
con el cambio climatico. De igual forma el fomento al comercio intrarregional,
incluso con monedas locales o una moneda única regional. Los países de
América Latina han comenzado a crear el Banco del Sur, iniciativa previa para
la creación del SUCRE como moneda única. (Esto entre otras cosas venía
siendo propuesto por miembros de nuestro observatorio y otros en diversos foros
internacionales: Conferencia de la SEPLA Montevideo Sept 2007, Conferencia
SERPAJ Ecuador feb 08,Conferencia del Foro mundial de alternativas Caracas Oct
08).
Concluyendo,
conforme se profundice la crisis, los países latinoamericanos se verán forzados
a volcarse más hacia adentro. Para los países periféricos en general y
particularmente para los más pequeños, la autarquía obviamente no es ninguna
alternativa. Desconexión implicará entonces necesariamente una re-conexión,
pero una re-conexión con un mayor grado de auto-determinación, soberanía y
menor dependencia del Norte. En términos políticos eso quiere decir la
re-conexión primero que nada dentro del continente mismo. Como los países
periféricos (más pequeños) dependen particularmente de lazos externos, la
integración de los países latinoamericanos se torna una necesidad y
entonces una prioridad política en tiempos de crisis.
Golpe de estado
en Honduras, cuarta flota USA, toma militar de Colombia: Una ofensiva militar
de EEUU sobre America Latina:
El golpe de estado
en Honduras se da en la precisa coyuntura cuando la crisis
neoliberal demandaba un proyecto económico y político más endógeno. Sin
entrar a discutir detalles del gobierno derrocado de Honduras (que
corresponden más a asuntos internos de los ciudadanos de ese país), hay sin
embargo aspectos que deseamos señalar: El
presidente liberal de Honduras, Manuel Zelaya, asumió el poder en 2006. Gobernó
en los tiempos en que la especulación de petróleo provocó un brusco ascenso en
los precios del combustible. A raíz de esto se dio una huelga de transportistas
y taxistas. Zelaya se vio presionado a acercarse a Petrocaribe y Venezuela para
adquirir petróleo a precio preferencial, solucionar el conflicto y el problema
energético del pais. Su acercamiento al ALBA afectó los contratos con Shell,
Texaco y Esso. Ante las presiones populares, Zelaya aumentó el salario
mínimo contra el agrado de la clase empresarial, subiéndolo apenas
al límite del costo de la canasta básica de alimentos.
A raíz de un grave
accidente de un avión de pasajeros en la capital, el presidente anunció el
traslado del aeropuerto civil hacia Palmerola con apoyo financiero de
Venezuela. En Palmerola está ubicada una base militar de Estados Unidos. Con
las tres medidas anteriores, el presidente se ganó el conflicto con las
transnacionales, con la clase empresarial local y con el Pentágono. Esto fue
pretexto suficiente para darle el golpe de Estado. Los países latinoamericanos
reunidos en la OEA percibieron otros motivos: Un ataque militar en contra de
America Latina comenzando por el eslabón más débil para revertir los avances
democráticos, la recuperación de su soberanía y el control de todos sus
recursos naturales en todo el continente,.
En efecto, desde
2008 bajo el gobierno del Sr. Bush y coincidiendo con el desplazamiento
de la IV flota estadounidense sobre los mares de América Latina, se comenzó a
montar el golpe en Honduras. Es algo parecido al ataque a Bahia de Cochinos en
Cuba, que se planeó bajo Eisenhower y se ejecutó bajo Kennedy. En ese entonces
el mundo estuvo al borde de la guerra nuclear. Se menciona entre los
involucrados y sus apoyos a un grupo de fanáticos neo conservadores anti
Castristas cubanos americanos, así como altos funcionarios del Sr. Bush primero
y luego vinculados a la administración Obama, como son los casos de John D
Negroponte, Otto Reich y finalmente a embajadores estadounidenses en Centro
América y a muchos otros, entre ellos el último ex candidato presidencial
Republicano a la cabeza de unos 17 senadores republicanos más.
Primero organizaron
el aislamiento político de Zelaya en la democracia formal y representativa
interna que desde la constitución de 1982 promovía la política neoliberal en
beneficio de la clase empresarial. Los principales medios de comunicación en
manos de una oligarquía muy conservadora, montaron campañas para desprestigiar
cada vez más al presidente. Ante el aislamiento progresivo, Zelaya opta por un
mayor apoyo popular mediante el camino de la democracia participativa e
introduce una encuesta preguntando sobre la opinión del pueblo en torno a una
nueva constituyente. De esta forma se abría el camino para un proyecto político
más endógeno, más popular y participativo. Todo parecía indicar que otro país
latinoamericano caminaría hacia la desconexión relativa hasta el día del golpe
militar. En realidad la coyuntura ha venido demandando de una mayor desconexión
del proceso de globalización neoliberal en el Sur en general y en América
Latina en particular.
El Golpe militar en
Honduras no puede ser visto como un golpe tradicional más en un pequeño país,
en tiempos de la guerra fría. Precedido por el despliegue de la IV flota de
EEUU sobre América Latina en 2008, de un ataque militar de Colombia en
territorio de Ecuador y simultáneamente con el acuerdo de instalación de 7
bases militares de EEUU en Colombia, son eventos que no pueden leerse
desconectados el uno del otro, por lo que son percibidos como un ataque militar
de Estados Unidos contra de “toda Latinoamerica”. Esos hechos además deben de
ser valorados y analizados no solo en el contexto local y regional, sino
que además dentro del contexto de la estrategia global post guerra fría de
Estados Unidos sobre Eurasia y el resto del mundo y en el contexto de la gran crisis
económica actual. En este contexto no es extraño que los países del planeta
inmediatamente respondieran en bloques condenando el golpe. Coincidieron sin
excepción todos los gobiernos de izquierda, centro o derecha.
Ante semejante
manifestación de solidaridad internacional, Estados Unidos se sumó
cautelosamente a la condena, ante el peligro de verse en solitario aislado del
resto del mundo, dañando así el futuro político de su nuevo gobierno. A pesar
del rechazo del Sr. Obama y la Sra Clinton al mismo, no se revertió el golpe.
Está claro que es imposible que el golpe militar se sostenga sin apoyo
desde Estados Unidos. Así quedó la impresión de que: O el presidente Obama y la
Secretaria de Estado habían mentido en sus declaraciones de intenciones ante la
previa cumbre de presidentes del hemisferio en Trinidad y Tobago, o que Obama
como Zelaya eran víctimas de insubordinación de sus propios subalternos. Sería
algo parecido a otro golpe de Estado en contra del Presidente Obama en su
propio país, a manos de un posible gobierno oculto de neo-conservadores
heredados por la administración Bush, quizás hasta con el control de los
armamentos nucleares de Estados Unidos.
El Sr Obama se
quejó luego de la “Ironía” de pedirle a su país no intervenir en los asuntos internos
de América Latina al tiempo que le pedían intervenir en Honduras. La realidad
es que lo que se ha pedido al Presidente no es “que intervenga” sino que ordene
el “alto a la intervención desde Estados Unidos” montándolo primero y
sosteniendo luego ese golpe de Estado. Se le pidió que investigara y sancione a
los responsables de su país y que suspenda todo tipo de relación y ayuda
militar a los golpistas como exigen las propias leyes de su nación y las
internacionales. En el ínterin los movimientos sociales sostienen su lucha por
más de dos meses. Con ello, para los movimientos sociales la exigencia por el
regreso del presidente Zelaya se incrementa, al tiempo que la estrategia de la
lucha popular avanza más. En este entorno en el que Washington apenas
comienza a presionar sobre los golpistas, la lucha del pueblo se fortalece
y va definiendo su propio rumbo más allá de Zelaya.
Estrategia
militar de Estados Unidos, retaguardia estratégica y America Latina
Cada vez más
analistas y gobiernos coinciden en la creencia de que Estados Unidos, ante su
incapacidad para controlar la crisis económica, se prepara para empujar una
gran guerra con un primer escenario en Eurasia y que para este efecto utilizan
a la OTAN y a Europa. Actuarian como punta de lanza para cercar a Rusia y China
(juntos la principal amenaza para EEUU), utilizando a los viejos países del
pacto de Varsovia y territorios de la ex Union Sovietica, ocupando el sur de
Asia y el Medio Oriente para penetrar en profundidad sobre la zona rica en petróleo
del mar Caspio y Asia Central. El proyecto contemplaría partir eventualmente
Siberia de Rusia y desmembrar a este país y a China en estados menores y
potencias militares de segundo o tercer orden, sin real peligro para el
establecimiento unipolar de Estados Unidos en el mundo. El problema es que este
camino esta lleno de grandes peligros. Uno de ellos el estallido de una guerra
termo nuclear en cualquier paso de dicha estrategia, aventura en la que los
pueblos nunca deberán acompañar a Estados Unidos. Por el contrario, la política
prudente es que toda la región latino americana declare su neutralidad ante una
eventualidad tal.
Para un escenario
de tal naturaleza, Estados Unidos requiere de una retaguardia estratégica
segura, pletórica de petróleo, recursos minerales y otros y esta retaguardia
-como durante la segunda guerra mundial- trátase obviamente de América
Latina. La forma más rápida de asegurarla es revirtiendo los avances
democráticos de la región e imponiendo dictaduras militares con nuevos estilos
pero dóciles a Estados Unidos. No sólo estorban los países Bolivarianos como el
del Presidente Chávez, sino también los gobiernos de centro y de derecha
moderada. Esto hace que el tema del golpe en Honduras sirvió hasta cierto punto
como cortina de humo para negociar las bases militares en Colombia. Política
prudente es no permitir en nombre de ninguna soberanía a algún país en
particular, que se afecte la soberanía y seguridad vital de los demás países
latinoamericanos. Es engañoso y absurdo el pretexto de lanzar una lucha
contra el narco tráfico con portaaviones, destructores, submarinos y misiles
balísticos de la IV Flota de EEUU y con armas de última e intermedia generación
apostadas en Colombia.
El golpe en
Honduras lejos de ser un anacronismo marca en la opinión de Rick Rozoff un
precedente para más en el futuro. Así como Afganistán se ha transformado
en el principal frente de guerra durante el último año (incluyendo los 7 meses
de Obama), así parece haber planes de agresión militar con América Latina,
relativamente apartado de esos conflictos en los últimos diez años (Rick
Rozoff, “US
Escalates War Plans In Latin America”). El motivo
geopolítico es la eventual ampliación de la guerra en las cercanías de China y
Rusia. Ello demanda una mayor seguridad en la oferta de petróleo y recursos
naturales para EEUU. En tiempos de guerra es riesgoso e inseguro el transporte
por los océanos. Estados Unidos necesita, en otras palabras asegurarse de los
recursos naturales más cercanos, es decir los de América Latina. El peligro, en
la coyuntura de la crisis, fue que el continente estaba definiendo cada vez más
su propio rumbo con autodeterminación sobre dichos recursos. EEUU quería
poner un alto y se dio el golpe militar en el eslabón más débil del continente.
En la opinión de
James Petras, EEUU persigue con el golpe la estrategia de retroceso, es decir,
de hacer retroceder a regímenes críticos electos para imponer clientes
acomodaticios y que opera en una multifacética política de abierta intervención
militar, de operaciones encubiertas a través de la ‘sociedad civil’, de una
retórica diplomática aparentemente benigna de sutil persuasión que depende en
mucho de la propaganda mediática. Creyeron que el ‘retroceso’ centroamericano
serviría de advertencia a otros regímenes con mentalidad independiente en la
región. Hoy en día, el centro-izquierda, e incluso los regímenes electorales de
la derecha, se oponen a los golpes militares en toda América Latina e incluso
en cualquier parte del mundo porque los ven como una amenaza potencial para su
propio futuro. Desde el punto de vista diplomático y político, la estrategia de
retroceso promovida por Estados Unidos, entonces, ha sido costosa (James
Petras, “La
estrategia de retroceso de Obama: Honduras, Iran, Pakistan, Afganistán; el
efecto boomerang”).
En opinión de la
especialista Ana Esther Ceceña, ”El ataque a Sucumbíos en marzo 2008 marcó el
inicio de un nuevo ciclo dentro de la estrategia estadounidense de control de
su espacio vital: el continente americano. El golpe de Estado en Honduras,… es
el primer operativo de relanzamiento de esa escalada. Colombia…. otorga
inmunidad a las tropas estadounidenses….y permite la instalación de 7 bases
militares norteamericanas que se suman a las seis ya reconocidas por el
Pentágono. Honduras constituyó…. una cortina de humo… (para) el establecimiento
de una sede regional de la llamada guerra preventiva en América, justo al lado
del Canal de Panamá y…de la cuenca amazónica….:Está en curso un proyecto de
recolonización y disciplinamiento del continente completo. Con la seguridad
económica que les establece al lado de la franja petrolera del Orinoco,
equivalente a los yacimientos de Arabia Saudí,…. de los mayores yacimientos del
planeta,…..500 años después, los habitantes de América Latina tenemos que
seguir deteniendo el saqueo, la colonización y las imposiciones….si no paramos
la militarización y el asentamiento de las tropas de EEUU en Colombia, las
luchas de los últimos 500 años habrían sido en vano (Ana Esther Ceceña, UNAM,
México, Alainet No 447 de agosto de 2009).
En la opinión de
Heinz Dietrich (14 de agosto de 2009), “con el ataque militar a Ecuador, la
activación de la IV Flota, el golpe militar en Honduras y la iraquización de
Colombia (bases militares), Washington ha re-implementado por la fuerza la
Doctrina Monroe en América Latina”. El golpe militar respaldado por los
halcones de Estados Unidos ha reafirmado el aislamiento político y diplomático
estadounidense en el Hemisferio. Es más, ha quedado clara la creciente
solidaridad entre los pueblos latinoamericanos y del mundo entero en la lucha anti
intervencionista. Difícilmente alguna región, país o alianza de importancia
seguirá a Estados Unidos en su ocupación armada en un pequeño país de la
periferia. El hecho de que EEUU a través de su Secretaria de Estado, se haya
negado a considerar el golpe militar como un “golpe” (para mantener su ´ayuda
militar´ a los golpistas de Honduras), ha reforzado la convicción entre todos
los países de América Latina de que Washington está tratando de dividirlos y
volver a los “viejos tiempos” de regímenes militares pro-estadounidenses.
La Cumbre de
UNASUR y las bases de EEUU en Colombia (Agosto 28 del 2009)
Por su importancia
nos referimos a la cumbre de UNASUR del 28 de agosto de 2009 cuando 12 paises
de América del Sur condenaron de diversas formas o manifestaron su desacuerdo
con el establecimiento u ocupación de las bases militares de EEUU en
Colombia. Este rechazo ha sido unánime desde todos los países de América
Latina. Este acuerdo junto con el desplazamiento de la IV Flota de EEUU y el
golpe de Estado de Honduras, es visto por muchos como un ataque estratégico de
Estados Unidos sobre América Latina, en el marco de su estrategia global de
dominación. El antecedente de invasiones, golpes de estado e intervenciones de
este país está vivo en la memoria continental que lucha por desarrollar un
proyecto más endógeno con una democracia más participativa. Nadie duda que ese
acuerdo con Colombia conduzca a revertir los avances democráticos y tomar
control militar de los recursos naturales de América Latina, mediante la
re-imposición de dictaduras militares.
Muy pocos desean
que el futuro de America Latina sea la reedición del socialismo del siglo XX
con los estilos del pacto de Varsovia, pero tampoco que sea la continuación del
capitalismo del siglo XX y su pasado sangriento. Ambas experiencias han
fracazado y no tiene sentido repetirlas. Nadie desconoce los errores y hasta
excesos que seguramente hay y habrán en la búsqueda de un mejor camino hacia
una sociedad más justa, pero cada vez son más las personas, movimientos y
países que lo ven ligado a la construcción de la paz, la democracia integral,
la tolerancia, el respeto mutuo, la libertad y la armonía entre el ser humano
con el medio ambiente tomando en cuenta las capacidades geofísicas del planeta.
La experiencia es la de un mundo que durante el siglo XX estuvo saturado de
despotismo, explotación, autoritarismos de izquierda, centro o derecha en medio
de las guerras más destructivas de la historia. Nadie desea volver a este
escenario.
Hemos señalado una
estrategia global de las élites de Estados Unidos, que al no encontrar salidas
ante la crisis, se encaminan rápidamente hacia el terreno militar, para
posesionarse y controlar todos los recursos naturales del mundo y continuar con
el derroche de los países ricos que ya es insostenible ante la capacidad
biofísica del planeta. Hemos señalado como un posible primer escenario de
guerra en Eurasia y por ello en América Latina, siendo el continente la reserva
estratégica de EEUU. Por ese motivo hay que acabar con las experiencias
democráticas locales e instalar bases militares de EEUU en la región. Este
es el primer gran peligro y ya comenzó a materializarse en Honduras.
Aparte del peligro
anterior, también hay el peligro de que en la eventualidad de una guerra ampliada
o mundial, el país de América Latina que albergue bases militares de Estados
Unidos, sus tropas y equipos, en tiempos de guerra se convierte automáticamente
en un “objetivo de ataque hasta nuclear”, hasta con misiles estratégicos
intercontinentales por parte de los enemigos de EEUU. En las bases planeadas
para Colombia, Guyana Francesa, Curazao, y Recife en Brasil, se contempla
incluso el apoyo y abastecimiento a la flota de bombarderos estratégicos
nucleares de Estados Unidos con destino a America del Sur y a Africa. Así se
desprende de la denuncia que hizo el presidente de Venezuela en la cumbre de
UNASUR del llamado “Libro blanco del Comando de Mobilidad Aéra de Estados
Unidos”. No se trata pues -expresaron otros jefes de estado- de “lucha contra el
narco tráfico”. Ello sería sólo el pretexto para un proyecto geopolítico con
propósitos militares distintos enmarcados en una estrategia militar global.
Como es obvio,
ningún pueblo o fuerza política responsable en el continente con
independencia de su ideología, desearía una dictadura militar o correr el
riesgo futuro de un desvastador ataque nuclear de represalia sobre alguna base
de Estados Unidos en América Latina en tiempos de guerra. Por esto el rechazo
latinoamericano a bases militares e intervenciones de EEUU es
crecientemente radical. Aunque, el presidente de Colombia utilizó el argumento
de la “soberanía” para lograr ese acuerdo entre su país y EEUU, en realidad se
trata de un asunto de “Seguridad Vital Continental” que está por encima de la
soberanía de un solo pais. La presidente de Argentina argumentó que “Una
soberanía debe ser la de todos, y no puede haber una soberanía que se imponga a
las demás”. Los demás jefes de Estado fueron enfáticos en rechazar la
instalación de dichas bases en Colombia.
La declaración
final de la cumbre señala algo que puede ser el futuro posicionamiento de toda
America Latina y el Caribe al decir que “América del Sur debe ser una zona de
paz y que hay que abstenerse de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza
contra la integridad territorial de otro estado de UNASUR”. Reafirma que “La
presencia de fuerzas militares extranjeras no puede con sus medios y recursos
vinculados a objetivos propios, amenazar la soberanía e integridad de cualquier
nación sudamericana y en consecuencia la paz y la seguridad de la región” e
“Instruyen al Consejo Suramericano de Defensa para que analice (en la
primera quincena de septiembre) el texto sobre “Estrategia Suramericana ,
Libro Blanco, Comando de Mobilidad aérea (AMC) (de Estados Unidos)”... a fin de
“considerar cursos de acción a seguir”. Una declaratoria de América Latina y el
Caribe -mas allá de UNASUR- como zona de paz y neutral en tiempos de guerra,
marcaría también la “desconexión” de la región de las aventuras militares de
EEUU
La ofensiva de EEUU
empuja a la región a una carrera armamentista adquiriendo armas convencionales
modernas o incluso capacidades nucleares disuasivas para defenderse, lo que
sólo serviría al negocio del complejo militar industrial. En ocasiones anteriores
hemos señalado que esto sería un gravísimo error en el que los estados
latinoamericanos nunca deben caer. No deseamos que América Latina vuelva a ser
victima del despotismo, ni sea convertida por el Pentagono ni en el escenario
del mayor Viet Nam de la Historia con ese país, ni en un escenario de guerra
con armas nucleares. Por esta misma razón, el pueblo de Colombia y los del
continente tienen la responsabilidad de impedir que el parlamento de ese pais
ratifique ese tratado o convenio de bases con Estados Unidos. Lo mismo vale
para los demás países. Estados Unidos ha demostrado una gran habilidad para
escalar conflictos pero muy poca capacidad ha demostrado para desacelerarlos y
en esto hay que ayudar a su pueblo.
La necesaria
integración de América Latina y el Caribe para sobrevivir
A partir del golpe
militar en Honduras y los acuerdos en marcha de nuevas bases estadounidenses en
Colombia, proyectos de integración como el ALBA, UNASUR, y la nueva
integración Sur-Sur más allá del continente, no sólo constituyen una
oportunidad económica sino son cada vez más una necesidad política de
supervivencia ante la amenaza que les representa la política actual de Estados
Unidos. En la crisis, las economías
emergentes más grandes como China o Brasil han visto la oportunidad de obtener
mayor beneficio y liderazgo en un nuevo orden mundial que podría emerger de la
misma. La lección de Honduras y la ocupación militar de Colombia, sin embargo,
han de ser una severa advertencia. En el nuevo proyecto de integración
latinoamericana y con el mayor peso político y económico a nivel internacional,
Brasil debe valorarlo mucho, ante una amenaza de intervención a nivel regional
o de guerra a nivel mundial cada vez más concreta, si jugará el juego de
Estados Unidos o si se sumará a la consolidación de un solo proyecto
político latinoamericano en afán de su propia sobrevivencia. Hoy, el ´salvase
quien pueda´, no salvará a ninguna nación latinoamericana, ni a Brasil. Hoy más que nunca, urge la lucha social por invocar el internacionalismo,
y apelar a la solidaridad e integración de los pueblos de todo el continente
latinoamericano y más allá, como la única fuente de defensa posible ante
una eventual guerra.
El peligro del
Neo Fascismo
Con la crisis del
neoliberalismo, las democracias representativas formales se agotan y aquí cabe
la lucha social por democracias más participativas que permiten una creciente
re-conexión con los intereses populares. De no ser así más bien existe el
peligro del avance neo-fascista. La primera tendencia ha predominado en la
actualidad en América Latina, mientras la última se desarrolla cada vez más en
el Norte y sobre todo en EEUU. El neo-fascismo en América Latina no parece ser
un proceso endógeno, pero adquiere más espacio cuando recibe intervenciones
desde afuera.
Sara Robinson
describe cinco fases para que una nación desemboque en el Neo-fascismo y señala
que EEUU, se encuentre ya en la tercera. En primer lugar emergería un
movimiento racista, sexista, xenofóbico, excluyente para reivindicar una
renovación nacionalista que restauraría el orgullo nacional perdido. En la
segunda fase, los movimientos fascistas se asientan y entran a partidos
políticos y se manifiestan en la mesa del poder. Los de la Derecha se niegan a
aceptar a la Izquierda como un legítimo gobernante. La elite conservadora
trabaja junto con los fascistas y los acepta como fuerza de choque para tomar
el gobierno norteamericano aunque sea por la fuerza. Es en esta fase que se
encuentra en este momento el gobierno estadounidense y así se entiende mejor el
golpe de Estado en Honduras.
La tercera fase es
una transición hacia un fascismo de altos vuelos con apoyo popular demandando
mano dura fuerte para salir de la crisis profunda. Falta poco para que entremos
en esta fase. Hoy en día no se necesita de grandes oradores en estadios
repletos o plazas públicas repletas de gente para manipular las masas hacía
aventuras extremas. Hoy los medios de comunicación masiva se encargan de esta
tarea demagógica. Nos encontramos en esta fase y todavía hay la oportunidad de
pararlo, señala la autora. Pasado ese momento, sin embargo, un estado policiaco
suele instalarse lo que puede degenerar en un genocidio sistemático dirigido
desde la cúpula del poder. A partir de aquí estamos ante el mayor peligro de
una guerra de gran envergadura (Véase, Sara Robinson).
Cambio
civilizatorio o barbarie; una historia que pueda repetirse
Hace años que la
economía productiva de Estados Unidos está estancada y el peso de las
manufacturas en la estructura de su PIB es cada vez menor. Peor aún, hay un
déficit profundo en su clasificación industrial, porque son extranjeros casi
todos los insumos de los productos norteamericanos finales. Estados Unidos se
ha des-industrializado y lo hace cada vez más. Una situación análoga sucede en
la Unión Europea e incluso se da en Japón en algunos sectores. En la industria
de textiles, automotores o informática ya no compiten sus empresas.
EEUU
no tiene la tecnológia suficientemente avanzada en la industria automotriz, ni
en muchas otras ramas productivas, para competir con Japón o Alemania; ni una
mano de obra suficientemente barata para poder hacer la competencia a las
economías emergentes. Esta situación se agrava aún más con el alza en el precio
del petróleo. Después de una ola inicial de los biocombustibles, entre 2005 y
2007, actualmente el real negocio de este sector se acabó. Hoy en día los
viejos países centrales apuestan a la fabricación de carros eléctricos, no
tanto para generar nuevos empleos, ni para lograr una recuperación ´verde´
como señalan los políticos, sino esperando un nuevo impulso al crecimiento y
por ende apostando a una nueva fase de acumulación sostenible.
Esta
opción no tiene mucho futuro. La crisis no sólo es económica sino también
ecológica. La economía global representa una gran pirámide de actividades y
operaciones que demandan energía y cuya oferta ha llegado a sus límites con la
energía no renovable (carbón, gas y petróleo sobre todo). Las fuentes
energéticas alternativas y renovables ni juntas son capaces de sustituir a las
fuentes de energía no renovable. Lo anterior significa a no muy largo plazo la
insostenibilidad del modo de consumo occidental. Consumir menos sería la
alternativa lógica. Sin embargo, ello demanda un cambio civilizatorio.
Una opción momentánea ya discutida en
círculos de élites del primer mundo desde los tiempos en que Robert McNamara
encabezó el Banco Mundial, ha sido la reducción de la población mundial. Armas
de destrucción masiva nuclear y sobre todo las biológicas han sido consideradas
y desarrolladas y hoy en día incluso las farmacéuticas. Las últimas son capaces
de provocar extensas pandemias. Es alarmante en este contexto que desde meses
antes se anuncia una nueva epidemia mortal en el mundo para el otoño boreal de
2009. No hay que olvidar tampoco el hambre como arma de destrucción masiva para
reducir al menos en un tercio la población mundial. Una pandemia en momentos de
profunda crisis con hambrunas tendrá efectos particularmente mortales en los
países donde más hambre hay. Según Naciones Unidas al menos 1.020 millones de
seres humanos viven ya en pobreza extrema, número que con la crisis
y depresión consiguiente tenderá a aumentar. Una nueva pandemia afectará
sobre todo a los más vulnerables en el mundo. Más de mil millones de personas
estarían bajo riesgo directo con semejante pandemia.
Ante la decreciente
capacidad geofísica de la tierra, la reducción de la población en los países
periféricos no es para nada efectiva, dada que la sobre explotación de los sistemas
por el derroche se da en las sociedades más ricas. Un 15% de la población
mundial absorbe anualmente el 80% de los recursos naturales extraídos con la
contaminación correspondiente. Entonces, sustituir las
cámaras de gas de Hitler por el asesinato por hambre, pandemias o guerra sobre
un tercio de la población mundial tampoco sirve para salvar al mundo de la
sobreexplotación de la tierra.
La
única salida viable es una economía de decrecimiento. Es la única solución para
salvar la vida humana y natural, pero ella implica una sentencia de muerte para
el capital. Sin crecimiento económico sustentable no hay posibilidad de una
acumulación sostenida. Por lo tanto, desde los intereses del capital hay que
posponer esta situación crítica hasta donde sea posible, aunque empeore a
diario la bio-capacidad de la tierra, último límite (externo) del capital. Si
los países emergentes obtuviesen la tecnología más avanzada, lo que es una
cuestión de tiempo, la capacidad competitiva se acaba en Occidente en general y
en EEUU en particular. Para posponer ese momento, la política imperial es
obstruir un mayor acceso a los avances tecnológicos. Para ello, los países de
Occidente y EEUU en primer lugar, procuran mantener en sus manos los derechos
de propiedad intelectual como un verdadero monopolio sobre el conocimiento. Ese monopolio se extiende al control de los alimentos y a la
manipulación genética de los mismos con semillas transgénicas controladas por
transnacionales desde el Norte.
Mientras
procuran vivir de manera improductiva de esa renta, Occidente en general y EEUU
en particular se lanza al mal llamado proyecto productivo de ´recuperación
verde´ y sobre todo en la industria automotriz. Esta transición, sin embargo,
es muy costosa y un asunto de
largo plazo. Sin una intervención muy costosa del Estado, tal proyecto no es
imaginable. El Estado norteamericano, sin embargo, ya se encuentra muy
endeudado. En la actualidad, esta transición industrial se financia con la
masiva impresión de dólares sin respaldo y de nuevo nos preguntamos, ¿Dónde
está el límite?
Guerra por los
recursos naturales y decadencia
Mientras
tanto, el crecimiento económico en los países emergentes continúa basándose en
el uso del petróleo y los recursos naturales. Conforme dichos países apuntan al
crecimiento, la demanda de esos ´commodities´, tiende a aumentar sin cesar. La
consecuencia es un aumento progresivo en los precios de los mismos recursos.
Los países periféricos suelen ser exportadores netos de los recursos naturales.
Los países centrales (con unas excepciones como Canadá y Australia) en cambio
son sus importadores netos. En tanto que el Sur destina más recursos naturales
para su desarrollo interno, habrá menos para Occidente. Con ello el crecimiento
económico en la economía real de Occidente se complicaría cada vez más. De ahí la urgencia del imperio por arrebatar sus recursos naturales a
los llamados países tercermundistas. Ante ello, América Latina debe organizarse
para defender sus bienes comunes.
Grafico: Evolución de los precios de ´commodities´
agosto 2008 julio
2009 (plomo, cinc, níquel, cobre y petróleo)
Fuente: Mary Anne & Pamela Aden, “The
commodity world is growing in stength”, www.gold-eagle.com
La guerra por los
recursos naturales en Medio Oriente, África y ahora también en América Latina
se acentuará cada vez más. Lo anterior quizás pueda posponer la decadencia de
Occidente pero no la podrá evitar. No hay posibilidad de sostener la demanda de
recursos naturales infinitamente ya que su oferta se limita cada vez más. El
peak-oil es una realidad hoy y el calentamiento global tambien. La oferta no
acompaña la demanda ni en la actual crisis. Aunque después de una ola
especulativa su precio cayó en picada, luego el precio del crudo volvió a
duplicarse. La tendencia futura será una cuota menor de los recursos naturales
para los países centrales. Con ello, el capitalismo se apagará primero en Occidente.
Esta situación obligará a la búsqueda de un nuevo paradigma. Aunque no hemos
llegado todavía a ese punto tampoco estamos muy lejos de ello (Andrew McKillop,
“Energy Transition The
Long Revolution” tomado de www.financialsense.com ).
En este momento
Rusia y China están discutiendo la instalación de enormes gaseoductos de
Siberia a través de Xinjiang hacia China, generando una mayor integración de
los dos países. Esta cohesión de Rusia y China a través de los países de Asia
Central (a menudo ex repúblicas soviéticas) es lo que Washington más teme.
Tratase de dos países emergentes vecinos que a la vez son dos de los tres
principales acreedores de EEUU y mejor armados después de EEUU. El subsuelo de
Siberia oriental contiene 135 trillones de pies cúbicos de comprobadas reservas
de gas natural. Ya sólo el gas natural de Kovykta podría proveer a China de gas
durante los próximos diez años.
Es más, durante la actual crisis económica,
Kazakstán recibió de China crédito por 5 mil millones de dólares para el sector
petrolero y de gas. El ducto de petróleo Atasu-Alashankou y el gaseoducto entre
China y Asia Central son parte de una política de integración de los países de
Asia Central a la economía china. Aunque Washington nunca lo admitirá, la
guerra en Irak y Afganistán, la amenaza de guerra sobre Irán y la reciente
desestabilización en Xinjiang constituyen en su conjunto una sola
modalidad de evitar lo inevitable: la integración
Gráfico: Oferta y
demanda de petróleo 1987-2009 ..
Gráfico: Evolución
de la oferta de petróleo y su proyección 2002-2012
Fuente de los
dos gráficos: Puru Saxena, “Peak Oil-Supply data”, www.gold-eagle.com
progresiva de la
Organización de Cooperación de Naciones de Shanghái (F. William Engdahl, “Washington
is Playing a Deeper Game with China”, Global
Research). Si a eso agregamos la relativa dependencia de la Unión Europea del
gas natural de Rusia, el aliado más directo de EEUU en un conflicto de mayor
envergadura internacional, estaría para colmo, relativamente neutralizado.
El conflicto en
Georgia se trató de esto mismo, el 40% del gas que requiere Europa transita por
Rusia, por lo que Europa se embarcó en la aventura de apoyar el ataque a los
territorios pro Rusos de Osetia del Sur y Abjasia en Georgia y asegurar así el
transito del gas y el petroleo a Europa procedente del mar Caspio. Rusia dejó
claro que no permitiría más acercamiento de la OTAN a su frontera sur, aplastó
al ejército de Georgia y puso una pistola en el pecho de Europa. Fué un momento
de gran tensión, en el que incluso pudo haberse detonado un conflicto nuclear
con Europa como escenario. Estados Unidos quedaría observando cómodamente desde
el otro lado del atlántico como se destruye el viejo continente. El arquitecto
de la teoría de usar a Europa para crear a través de la OTAN un cerco cada más
cerrado sobre Rusia, ha sido el Sr. Brezinski consejero demócrata de Estados
Unidos y del actual presidente Obama.
Urge la lucha
contra una gran guerra, amenaza cada vez más real.
La Gran Depresión
del siglo XXI constituye una coyuntura de inauguración para una guerra de gran
escala con el riesgo de desembocar en una tragedia para la toda la humanidad.
EEUU y la OTAN mueven sus fichas militares dentro de Ucrania que tiene una
frontera de 2.300 kilómetros con Rusia. Se desarrollan otras fuerzas militares
en Chequia, Polonia, los países bálticos, Georgia y Azerbaiyán y a la vez
avanzan por el mar en dos direcciones: por un lado en el Mar Báltico y el Mar
de Barents y por el otro en el Mar Negro y el Mar Caspio. El cerco que
amenaza a Rusia avanza de manera considerable. El rol aparentemente asignado a
Canadá finalmente, es servir de punto de lanza en una eventual confrontación
con Rusia en el Ártico (Rick Rozoff, “Arctic:
Canada Leads NATO Confrontation With Russia”).
En la opinión de
Rozoff, el polo del Norte es tal vez el lugar más estratégico para el
lanzamiento de misiles balísticos ya que permite llegar a un determinado lugar
a los submarinos sin poder ser detectados y acorta además el tiempo requerido
para llegar al objetivo de su contrincante. Rusia es la única nación en el
mundo que cuenta con una triada nuclear- bombarderos estratégicos, misiles
balísticos de largo alcance y misiles balísticos lanzados desde submarinos- que
en su conjunto tienen la capacidad de defensa y contra respuesta inmediata ante
el llamado “First Nuclear Strike”. El objetivo de contar con una capacidad nuclear
trifurcada, es reducir de manera significativa la capacidad del enemigo de
destruir las fuerzas nucleares de una nación con el primer golpe nuclear. Esta
capacidad de respuesta, a su vez, es una amenaza creíble ante un ´primer golpe
nuclear´ y la mejor defensa de una nación ante una amenaza nuclear. En el
círculo polar Rusia está concentrando su última línea de defensa contra
semejante amenaza (Rozoff, ob.cit.).
Una guerra internacional de gran escala sólo
acentuará la crisis ecológica y profundizará la
crisis económica a nivel mundial. La tragedia humana que implique demandará la
solidaridad y lucha de todos los pueblos contra el imperio y para poner un
límite a la irracionalidad del capital. La sola Gran Depresión del siglo XXI
pondrá a prueba seria el paradigma vigente, ni hablar cuando estalle una guerra
ampliada a escala internacional. Así como durante el prolongado crecimiento
negativo de la Gran Depresión del Siglo XX Maynor Keynes propuso la “economía
de démurrage”, con mucho más razón se debatirá mañana ya no solo a nivel
académico, la urgencia de instaurar una economía con crecimiento negativo que
promueva el ´buen vivir´ de las grandes mayorías, sino será demandada
internacionalmente por los pueblos del mundo en lucha. Estamos, en otras palabras,
ante un momento histórico: O triunfará la lucha por un cambio civilizatorio, o
desembocaremos en la barbarie. La
historia, sin embargo, nos enseña que la primera suele darse sólo después y en
medio de la segunda. Demandará mucha lucha y solidaridad y unidad internacional
para invertir esta lógica y UNASUR ha dado un buen paso, pero faltan muchos
más.
1 de Septiembre 2009
http://alainet.org/active/32891